Foro Económico Mundial aboga por sostenibilidad en todo, menos el gasto excesivo

POR LUIS MIRANDA | THE REAL AGENDA | ENERO 25, 2013

Parece que la sostenibilidad es un concepto que no es aplicable al dinero y la deuda. Al comenzar, invitados del Foro Económico Mundial en Suiza, han centrado sus presentaciones en la exigencia de que el mundo se financie a nivel mundial a través de la “ecologización” de la política, lo que podría costar unos $ 14 trillones. Los líderes gubernamentales y corporativos continúan usando el alarmismo sobre el calentamiento global – aunque datos de la NASA muestran que poco o ningún calentamiento ha ocurrido en los últimos 20 años.

Los oradores en Davos han hecho lo que ha sido llamado por The Independent como una dura advertencia a largo plazo sobre el crecimiento sostenible, que por alguna razón incluye toda actividad humana, menos la creación de más deuda. Según los participantes, el mundo tiene que gastar lo que sea necesario para financiar su soñada Agencia Ambiental Mundial que determinará qué se puede hacer y que no, sobre la base de supuestas normas ambientales.

Uno de los participantes más activos ha sido el ex presidente de México, Felipe Calderón, quien hizo eco de las llamadas para salvarnos a todos de los “efectos devastadores” del calentamiento global. Globalistas detrás de gente como Calderón, quieren cambiar dramáticamente la forma en que el mundo funciona erradicando gran parte de las actividades humanas relacionadas con la industria, la gestión forestal, agua y energía, producción de alimentos y otros.

El intento de desindustrialización el planeta comenzó en el núcleo de las Naciones Unidas, donde los tecnócratas llaman a menudo para que los Estados reconozcan la necesidad de tener un gobierno mundial. Ese poder mundial estaría formado por entidades como la Agencia Ambiental Mundial, la recién creada entidad financiera europea gobernada de acuerdo al Mecanismo Europeo de Estabilidad – el mecanismo para controlar todas las transacciones financieras – y las organizaciones adheridas a la Organización Mundial de la Salud y la Organización Mundial del Comercio.

La denominada nueva política ambiental tiene su origen en el Programa de las Naciones conocido como Agenda 21, que en última instancia tiene la intención de obligar a la gente a vivir en ciudades prisión bajo completa vigilancia y sometidos a estándares de vida mucho más bajos.

En 2012, la conferencia de Davos formó la Alianza de Acción para el Crecimiento Verde, que es el organismo encargado de la coordinación de políticas ambientales que se relacionan con el desarrollo. De acuerdo con el ex presidente mexicano, la afluencia de dinero en efectivo ayudaría a los esfuerzos mundiales para frenar los desafíos que presenta el cambio climático. Inicialmente, el fondo ambiental recibiría una inyección de $ 700 mil millones al año hasta el 2030, y el dinero supuestamente sería utilizado para pagar por los costos de “salvarnos” del  calentamiento global.

Calderón no detalló las características específicas del gasto de esos fondos. Como el líder de la Alianza, Calderón claramente se refirió a los EE.UU. al usar los daños causados por el huracán Sandy para conseguir apoyo para su plan. Él utilizó el término «adelantarse» para referirse a asegurar el apoyo financiero para los desastres naturales desconocidos que, según él, están a la vuelta de la esquina.

Calderón no explicó cómo él determinó el costo total de la financiación de los esfuerzos de preparación y mitigación de desastres naturales, tales como Sandy. Según un informe elaborado por la consultora Accenture, que se usa como una especie de vara de medir y determinar el impacto de los daños causados ​​por un desastre natural, el costo de lidiar con las consecuencias del huracán Sandy fueron de $ 50 mil millones.

Felipe Calderón, quien terminó su mandato como presidente de México en noviembre, no pudo hacerse cargo de su propio país durante los seis años que ocupó la presidencia, pero sus manejadores creen que está capacitado para responsabilizarse por un asunto aún más complicado, como las supuestas consecuencias que implica el calentamiento global. “Está claro que estamos frente a una crisis climática con impactos potencialmente devastadores en la economía global”, dijo Calderón al hablar en Davos.

“El crecimiento económico ecológico es la única manera de satisfacer las necesidades de la población actual y la gente hasta 9 mil millones en 2050, impulsando el desarrollo y el bienestar mientras se reducen las emisiones de gases de efecto invernadero y se aumenta la productividad de los recursos naturales.”

Calderón no habló de los graves problemas ambientales causados ​​por las corporaciones internacionales que contaminan el planeta con sus experimentos al aire libre como las estelas químicas y los organismos genéticamente modificados. Estos temas no parecen estar en la agenda de los temas que deben ser tratados en Davos. La razón de esto es que el Foro Económico Mundial, al igual que el Foro Social Mundial no son nada más que ejemplos de oposición controlada utilizada por las grandes corporaciones para estafar a la sociedad en la creencia de que tienen una voz en los asuntos.

Calderón también recitó el mismo discurso globalista que otros de sus compinches suelen utilizar para impulsar la falsa agenda ambiental: “El crecimiento económico y la sostenibilidad son inter-dependientes, no se puede tener uno sin el otro, y la inversión ecológica es el pre-requisito para la realización de los dos objetivos “. Lo que esto significa es que si los globalistas logran hacer lo que quieren, todo lo creado, distribuido y consumido tendrá que cumplir con los niveles irracionales de las normas ambientales que hacen que sea imposible que tener una economía real.

La Alianza liderada por Calderón es respaldada por entidades como el Banco Mundial, el Deutsche Bank y el Banco Europeo para la Reconstrucción y el Desarrollo. Su plan incluye una propuesta para exigir que el dinero de los contribuyentes se use para garantizar, asegurar y / o incentivar la aplicación de los regímenes de emisiones bajas en carbono que acelerará la desindustrialización de la economía mundial mediante la eliminación de las actuales fuentes de energía, como centrales de carbón y combustibles fósiles sin tener una alternativa real para sustituirlos.

Lo que Calderón y el resto de la cábala globalista están pidiendo a los países es que financien los mecanismos de control mientras abandonan proyectos en sus países que podrían mejorar los niveles de vida en los países, o en programas que realmente podrían ayudar a la gente a mitigar el impacto de graves problemas y las crisis fabricadas por las grandes corporaciones que controlan el planeta, tales como el hambre y la guerra.

Los miembros de la Alianza quieren convencer a los asistentes a apoyar su plan de utilizar $ 5 trillones al año, que se utiliza en la producción, tecnología y producción de energía tradicional, para supuestamente construir alternativas más ecológicas. Calderón probablemente no es consciente del caso Español, donde el gobierno fallidamente promulgó una estructura para crear e impulsar una economía verde.

El país invirtió fuertemente en las llamadas fuentes alternativas de energía, utilizando miles de millones de dólares del dinero de los contribuyentes para presuntamente financiar proyectos en conjunto con las empresas privadas que, al final, tal como sucedió en los Estados Unidos bajo Barack Obama, se marcharon con el dinero en efectivo sin producir ninguna fuente alternativa de energía.

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World Economic Forum calls for Sustainability on everything but out of control Spending

By LUIS MIRANDA | THE REAL AGENDA | JANUARY 22, 2013

It seems that sustainability is a concept that is not applicable to money and debt. As the World Economic Forum begins in Davos, Switzerland, the first round of speeches has been focused on demanding that the world finances a global ‘greening’ policy which could cost as much as $ 14 trillion. Government and corporate leaders are at it again, scare mongering about global warming — no matter NASA’s own data shows little or no warming for the past 20 years.

Speakers at Davos are delivering what has been called by The Independent as a stark warning about long-term sustainable growth, which for some reason includes every single human activity but out of control debt creation. According to participants, the world must spend itself into oblivion to finance their dreamed global environmental agency which will dictate what can be done based on supposed environmental standards.

One of the most outspoken participants yesterday, was former Mexican president Felipe Calderon, who echoed calls for saving us all from the ‘devastating effects’ of global warming. Globalists behind people like Calderon, intend to dramatically change the way the world functions by downsizing all human activity related to industry, forestry, water and power management, food production and others.

The move to de-industrialize the planet, began at the core of the United Nations, where technocrats often call for a one world government that needs to be recognized by all nation-states. That world power would be formed by entities like the global environmental agency, the newly created European financial entity ruled according to the European Stability Mechanism — the mechanism to control all financial transactions — and organizations adhered to the World Health Organization and the World Trade Organization. The new so-called environmental policy is rooted on the United Nation’s Agenda 21, which ultimately intends to cram people into prison cities under complete surveillance and according to new lower living standards.

In 2012, the Davos conference formed the Green Growth Action Alliance, which is the organization in charge of coordination environmental policy as it relate to development. According to the former Mexican president, the influx of cash would truthfully aid the global effort to curb the challenges presented by climate change. Initially, the environmental fund would receive an injection of $700 billion a year up until 2030 and the money would allegedly be used to pay for the costs of ‘saving us’ all from global warming.

Mr. Calderon did not detail the specifics of the spending.As the leader of the Alliance, Calderon clearly address the U.S. by making use of hurricane Sandy to rally support for his plan. He used the term ‘pre-empt’ to refer to securing financial support for unknown natural disasters that according to him are just around the corner. Mr. Calderon did not explain how he came up with the total cost of financing any efforts to prepare and mitigate natural disasters such as Sandy.According to a report produced by Accenture Consultancy, which was used as a kind of measuring stick to determine the impact of the damage caused by a natural disaster, the cost of dealing with the consequences of hurricane Sandy were of $50 billion.

Felipe Calderon, who ended his tenure as Mexican president back in November, could not take care of his own country for the six years he held the presidency, but someone his handlers believe he can be the poster boy for an even more complicated matter such as the supposed dire consequences posed by global warming. “It is clear that we are facing a climate crisis with potentially devastating impacts on the global economy,” said Calderon while speaking at Davos.

“Greening global economic growth is the only way to satisfy the needs of today’s population and up to 9 billion people by 2050, driving development and well-being while reducing greenhouse gas emissions and increasing natural resource productivity.”

Calderon did not speak about the grave environmental problems caused by international corporation that pollute the planet with their open air experiments using chemtrails and genetically modified organisms. These topics don’t seem to be in the agenda of the issues that must be dealt with at Davos, it seems. The reason for this is that the World Economic Forum, just as the World Social Forum as nothing else than controlled opposition used by the large corporations to swindle society into believing that they have a voice on the issues.

Calderon also recited the same speech other fellow globalists often use to drive attention to the fake environmental agenda: “Economic growth and sustainability are inter-dependent, you cannot have one without the other, and greening investment is the pre-requisite to realizing both goals”. What this really means is that if globalists have their way, everything created, distributed and consumed will have to meet irrational levels of environmental standards that will make it impossible to actually have an economy.

Calderon’s Alliance is backed-up by entities such as the World Bank, Deutsche Bank and the European Bank for Reconstruction and Development. Its plan includes a proposal to demand that taxpayer money to guarantee, insure and / or incentivize the application of low-carbon emission schemes which in itself will cause the acceleration of the de-industrialization of the global economy by eliminating current sources of energy such as coal plants and fossil fuels without having a real alternative to substitute them.

What Calderon and the rest of the globalist cabal are asking countries to do is to finance their mechanisms of control while abandoning projects at home that could potentially improve standards of living on a country by country basis or on programs that could truly help people mitigate the impact of serious challenges and crises manufactured by the large corporations that control the planet, such as famine and war.

Members of the Alliance want to convince attendees to support their plan to use $5 trillion a year that is used in the production of traditional energy technology to supposedly build greener alternatives. Mr. Calderon is probably not aware of Spain’s failure to enact any kind of structure to drive a green economy. The country invested heavily in so-called alternative energy sources, using billions of dollars of taxpayer money to allegedly finance projects in conjunction with private corporations that in the end, just as it happened in the United States under Barack Obama, walked away with the cash without producing one single real alternative source of energy.

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