Asesinar a los estadounidenses es “legal”, “sabio” y “ético”

POR LUIS MIRANDA | THE REAL AGENDA | FEBRERO 10, 2013

La oficina legal de la Casa Blanca ha establecido que es legal matar a un ciudadano de los EE.UU. en el extranjero “si un miembro del gobierno” asegura que el objetivo de matar a alguien que representa una “amenaza inminente para el país” es más eficaz que su captura. La Casa Blanca ha dejado claro esta decisión a través de su portavoz, Jay Carney. “El presidente tiene mucho cuidado al llevar a cabo la guerra contra el terrorismo de conformidad con la Constitución y las leyes”, dijo Carney.

La licencia para matar que ha dado el permiso de la administración Obama para acabar con las vidas de los estadounidenses en el extranjero fue expuesta después de que un documento de 16 páginas creado por el Departamento de Justicia estadounidense se hizo público. El documento afirma que asesinar a estadounidenses no viola la Constitución de los EE.UU. o los derechos de los ciudadanos.

En el memorando se extiende el concepto de “ataque inminente” y otorga al Gobierno de los EE.UU. la autoridad, en caso de tener “evidencia concreta” de una conspiración para buscar, localizar y matar a los estadounidenses que la Administración considere peligrosos para los intereses estadounidenses. Aunque en el documento se describen como posibles sospechosos miembros de Al Qaeda, o personas que están a cargo de las operaciones terroristas, lo cierto es que otros documentos, como manuales militares retratan a ciudadanos constitucionalistas, libertarios, partidarios de Ron Paul, propietarios de armas y veteranos como amenazas domésticas que también pueden ser blanco de asesinato. De hecho, en 2012, el gobierno de Obama y el Congreso de EE.UU. aprobaron la Ley de Autorización de Defensa Nacional, que también permite al presidente asesinar estadounidenses en territorio de EE.UU..

El documento obtenido por NBC News es parte de un memorando legal de 2011 que se pasó a algunos de los miembros de las comisiones de Justicia y de Inteligencia del Senado. Este informe fue escrito meses antes de ponerse en marcha los ataques con aviones no tripulados en Yemen, en un supuesto intento de evitar inminentes ataques terroristas contra los EE.UU. o sus intereses en la región. Uno de esos ataques fue utilizado para asesinar a un ciudadano nacido en los EE.UU. — Anwar Al Awlaki — que supuestamente era miembro de Al-Qaeda. Un detalle importante pero que se oculta en los reportes de la prensa corporativa, es que Awlaki cenó en el Pentágono con los miembros superiores del Departamento de Defensa días después de los ataques terroristas del 11 de septiembre. En realidad, Awlaki era un agente estadounidense en la región. Además de al-Awlaki, otros tres estadounidenses murieron en el ataque, entre ellos el hijo del clérigo de 16 años de edad.

Según organizaciones de derechos humanos en los EE.UU., Awlaki sufrió una ejecución extrajudicial, por lo que presentaron quejas contra el gobierno exigiendo saber cual había sido la base legal para esta acción. Awlaki era un ciudadano estadounidense, a quien le gustaba predicar la yihad mientras se refugió en Yemen. Esto significa que él debía haber sido detenido y enjuiciado, dándole la oportunidad de ser juzgado como lo manda la ley.

La Administración de Obama, con el apoyo de varias sentencias judiciales, rechazó repetidamente las solicitudes de los legisladores, grupos de derechos civiles y organizaciones para dar a conocer los estatutos y otra información sobre los eventos extrajudiciales. La administración también se negó a reconocer la existencia de estos eventos.

“Estos ataques con aviones no tripulados son legales, éticos e inteligentes”, dijo el portavoz de la Casa Blanca. Ahora que el memorando se ha hecho público, Washington tendrá sus manos llenas por un escándalo que no se esperaba.

La administración “es muy cuidadosa” al momento de decidir a quién y cuándo atacar, señaló Carney.

Después de contestar las preguntas de la prensa de la Casa Blanca, Carney fue interrogado acerca de si un joven de 16 años de edad, que murió por el ataque teledirigido que mató a Awlaki, también representaba una amenaza para los Estados Unidos. “Para un presidente que se opone a la tortura y que considera que el ahogamiento simulado como tal, no es una violación de los derechos humanos matar a un ciudadano estadounidense sin juicio?

La semana pasada, el Congreso estadounidense realizó audiencias para confirmar confirmar al hombre elegido por el presidente Obama para encabezar la CIA. John Brennan, uno de los promotores de la estrategia de los ataques con aviones no tripulados y actual asesor anti terrorista de Obama se enfrentó a preguntas sobre la política del gobierno antes de su confirmación. Varios de los congresistas que cuestionaron a Brenan pidieron a la administración revelar los supuestos utilizados para aprobar los ataques con aviones no tripulados en lo que respecta a los ciudadanos estadounidenses.

La carta implicaba la más dura advertencia hecha hasta la fecha contra esa estrategia y senadores acordaron oponerse a las candidaturas para el Pentágono y la CIA, a menos que las notas se hicieran públicas. Por lo tanto, la confirmación de Brennan fue fácil.

Un documento emitido por el grupo de defensa de Open Society Justice Initiative (OSJI) afirmó que al menos 54 países colaboraron “activamente” con el programa secreto de detención ilegal de sospechosos de terrorismo desarrollados por la CIA después de los ataques del 11 de septiembre de 2001. Hoy hemos aprendido que oficialmente esta lista incluye al infame aliado de EE.UU. en el Oriente Medio: Arabia Saudita.

El informe es de más de 200 páginas establece que la administración de George W. Bush abrazó el “lado oscuro” para supuestamente combatir el terrorismo internacional. De acuerdo con el estudio, la administración republicana autorizó numerosas violaciónes de los derechos humanos sin tener en cuenta las leyes estadounidenses o internacionales.

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Senado de EE.UU. Aprueba Ley que permite secuestro, prisión, tortura y asesinato de Estadounidenses

Por Luis R. Miranda
The Real Agenda
30 de noviembre 2011

Un nuevo proyecto de ley presentado en el Senado de los EE.UU., (S.1867) La Ley de Autorización de Defensa Nacional, establece que el Presidente de los Estados Unidos, quienquiera que sea, puede detener por tiempo indefinido, encarcelar, torturar y asesinar a alguien si él o ella se considera un sospechoso de cualquier cosa que el gobierno de EE.UU. quiera decir. La detención, encarcelamiento, tortura y asesinato se produce sin que la persona haya sido acusada o llevada a juicio. Las personas podrán ser secuestradas en cualquier lugar dentro o fuera de los Estados Unidos.

La nueva ley amenaza tanto las libertades civiles y constitucionales de los ciudadanos, que sus autores supuestamente quieren proteger al darle al presidente la facultad antes citada, que sus colegas senadores han llevado al Senado enmiendas que eliminen la parte del texto que permitiría que cualquier presidente ejecute lo que antes era una detención ilegal, pero que ahora es perfectamente legal.

El senador Rand Paul es uno de los que tratan de preservar lo que muchos consideran las libertades fundamentales protegidas por la Constitución de los Estados Unidos. En el Senado, el Sr. Paul recordó a sus colegas que nunca es una buena idea cambiar libertad por seguridad. Asimismo, explicó que eliminar el derecho de los ciudadanos a ser formalmente acusados y declarados culpables en un tribunal de justicia, en lugar de simplemente ser designado como un sospechoso que puede ser secuestrado y llevado preso para siempre, sería como dejar que los terroristas ganen.

La parte más controvertida de la ley dice: “El Congreso afirma la autoridad del Presidente de utilizar toda la fuerza necesaria y apropiada de conformidad con la Autorización del Uso de Fuerza Militar, incluyendo la autoridad de las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos para detener a las personas quedando pendiente declaraciones en el marco del derecho de la guerra. ” ¿Dónde está la parte jugosa? pueden pensar muchos de ustedes. No dice que las personas pueden ser torturadas o asesinadas! Bueno, lo de asesinar ya se habían aplicado antes, cuando el Presidente fue galardonado con el poder de secuestrar y matar a cualquiera que se encontrara luchando con un grupo terrorista, incluso si se trataba de un ciudadano estadounidense. Así es como el Sr. Anwar al-Awlaki, el ex-agente de la CIA y supuesto miembro de Al-Qaeda fue asesinado.

Pero específicamente en esta ley, el concepto de dar al Presidente facultades para decidir cuándo utilizar las Fuerzas Armadas para secuestrar y mantener en prisión a alguien en el territorio de los EE.UU. o en el extranjero es claramente un concepto renovado. Pero no sin antes tratar de ocultarlo de la vista del público. A principios de esta semana, el senador Lindsey Graham llegó al pleno del Senado para aclarar las cosas con respecto a lo que el entonces nuevo proyecto de ley permitiría hacer al presidente. “… La sección sobre la custodia militar, tiene muchas salidas e excepciones; una gran flexibilidad, y no se aplica a los ciudadanos estadounidenses. El Artículo 1031 sí se aplica a los ciudadanos estadounidenses, y en este se designa el mundo como el campo de batalla, lo cual incluye el territorio estadounidense”. En otras palabras, cualquier persona puede ser detenida en los EE.UU. o en el extranjero, según lo determine el Presidente, ser detenido sin cargos por un período indefinido de tiempo. Este tratamiento se ha aplicado hasta ahora sólo a los prisioneros de guerra (POW) muchos de los cuales fueron enviados a la prisión de Abu Ghraib y la Bahía de Guantamo en Cuba.

Otros senadores como Kelly Ayotte, republicana de New Hampshire, también defendió el entonces proyecto de ley diciendo que en S.1867 “Simplemente estamos diciendo que usted tiene la opción de asegurarse de que podamos juntar datos de inteligencia como la principal prioridad.” Además de Lindsey Graham y la señora Ayotte, otros patrocinadores incluyen al senador John McCain, republicano de Arizona, y Carl Levin, un Senador demócrata. Aunque el presidente Obama ha amenazado con vetar la ley si la sección de la detención indefinida no se quita, una enmienda para hacer exactamente eso fracasó anoche en el Senado, y el proyecto de ley, con la condición de detención ilegal y todo, fue aprobado ayer por la noche en Washington .

La situación jurídica de los ciudadanos en los Estados Unidos y en el extranjero es aún más grave cuando se pone en perspectiva. Es decir, cuando se revisan las últimas leyes, disposiciones, poderes presidenciales y la literatura dada a las diferentes agencias de ley. De hecho, ha hay un plan abierto para utilizar a los militares de EE.UU. en las calles de los Estados Unidos, y el ejército ya está en las calles. Se les ha visto en las carreteras locales y caminos acompañados por la policía local deteniendo vehículos y solicitando de manera ilegal que los conductores les permitan registrar sus autos. Junto con estas acciones, informes como el del Departamento de Seguridad Nacional y el MIAC indican que la actual tendencia a colocar a los militares en las calles y carreteras no tiene nada que ver con el terrorismo, sino que todo es para los ciudadanos estadounidenses. Estos incluyen pero no se limitan a soldados retirados, propietarios de armas, los libertarios, la gente que protesta contra el gobierno y sus políticas, activistas contra la guerra y así sucesivamente.

“Sólo hace unos años me dijeron, bueno, eso es absurdo. No queremos usar a los marines y el ejército contra el pueblo estadounidense. Esto sería una tiranía, que solo se ve en un país del tercer mundo. Es como imponer la ley marcial. Pero ahora sí quieren hacerlo para supuestamente mantenernos a salvo de Al-Qaeda “, explica el periodista de radio Alex Jones, que ha pasado la mayor parte de los últimos 16 años hablando del acaparamiento de poder sin control del gobierno y la forma en que el poder es por lo general empleado para oprimir a los ciudadanos. Jones declaró en la televisión Russia Today que la ley tiene una sección que dice que los estadounidenses están exentos de la detención, el encarcelamiento, la tortura y el asesinato, pero que luego tiene otra sección en la que establece claramente que la exención llega tan lejos como el Presidente y el Ejército lo digan. En otras palabras, la exención se puede eliminar en cualquier momento. La observación de Alex Jones es apoyada por el congresista Justin Amash, quien dijo que “esta ley fue cuidadosamente diseñada para engañar al público “.

La aprobación de este proyecto de ley en el Senado, literalmente significa el fin del Estado de Derecho, así como el fin de Posse Comitatus, que prohíbe el uso del Ejército de Estados Unidos en territorio de EE.UU..

Citando a James Madison, el senador Rand Paul advirtió al Senado anoche que “Los medios de defensa contra los peligros exteriores históricamente se han convertido en instrumentos de tiranía en casa”, y luego añadió el parecer de Abraham Lincoln sobre la importancia de la verdadera libertad: “Estados Unidos nunca será destruido de afuera hacia dentro. Si fallamos y perdemos nuestras libertades, será porque lo destruimos nosotros mismos. ”

El joven senador de Kentucky dijo que siempre ha sido durante los conflictos que han habido luchas por mantener y proteger las libertades civiles, como el habeas corpus y la libertad de prensa. El Sr. Paul advirtió de que los derechos y libertades que se regalen ahora no volverán como sucedió en el pasado por la sencilla razón que el propio Estado ha logrado mantener un estado constante de guerra y conflicto. “Estos derechos a los que renunciemos ahora nunca se podrán restaurar.” , dijo el senador Paul.

Toda la base de la ley es, según las directrices del Presidente, dar a los militares el poder de arrestar a personas sospechosas de estar vinculados a un determinado grupo terrorista. La detención y las nuevas medidas impuestas por las autoridades a los sospechosos automáticamente violan el debido proceso, uno de los pilares más importantes de cualquier nación democrática, el derecho a ser formalmente acusado y juzgado en un tribunal de justicia, ya sea por un juez o un jurado y el derecho a defenderse en ese órgano jurisdiccional. La nueva ley establece claramente que esto se aplica a los ciudadanos estadounidenses en el país y el extranjero. “Esta propuesta es una reminiscencia de lo que hizo Egipto con su ley de emergencia permanente”, destacó el senador Paul.

Como la ley funciona ahora en los Estados Unidos, la legislación aprobada por el Congreso de los EE.UU. ya define como un crimen el ayudar a un terrorista o una organización terrorista de cualquier ninguna manera. “José Padilla fue condenado y sentencias a 17 años de prisión por conspirar para proveer apoyo material a Al-Qaeda”, afirmó el Senador Paul. La ley S.1867 ahora sólo podría ser detenida en la Cámara de Representantes, porque aunque el presidente Obama ha dicho que la vetaría, la verdad es que el propio Obama ha aprobado gran parte de lo que está escrito en la Ley de Autorización de Defensa Nacional, es decir, las detenciones secretas y torturas de los detenidos. Estas medidas han sido aprobadas bajo la Ley de Comisiones Militares y la Ley Patriota, cuyos poderes se han aumentado desde que George W. Bush la aprobó por primera vez. Por lo tanto, no, no podemos contar con el actual Presidente de los EE.UU. para detener la implementación de prácticas como la detención, encarcelamiento, tortura y asesinato de ciudadanos estadounidenses ni en casa ni en el extranjero.

“Usted puede ser secuestrado y nadie sabe a dónde lo llevaron nunca más”, advirtió Alex Jones en Russia Today.

Tal vez uno de los hechos más reveladores acerca de la ley S.1867, es que nadie en la prensa estadounidense está hablando de ello. Sólo los llamados medios alternativos de prensa y medios de comunicación extranjeros se ocupan de que la gente en el Congreso quieran permitan a los militares gobernar el país. Sin embargo, este comportamiento de los medios tradicionales no es una sorpresa, pues han hecho lo mismo con respecto a otras noticias que afectan directamente a los estadounidenses en el país y el extranjero. Por ejemplo, mientras que los medios de comunicación extranjeros, o medios de comunicación estadounidenses publicados y distribuidos en el extranjero describen las protestas de los ciudadanos del mundo contra las medidas de austeridad, los rescates bancarios, la inconformidad de los afganos de Pakistán, y los sirios contra los estadounidenses y los bombardeos de la OTAN en sus países, las ediciones locales de la prensa estadounidense se concentra en temas que distraen, como el número de mujeres que acusan al pre-candidato presidencial republicano Herman Cain de acoso sexual, cuándo empezaremos la temporada en la NBA o el número de años de cárcel que el médico de Michael Jackson obtiene después de haber sido encontrado culpable. La gran prensa ni siquiera ha hablado mucho acerca de algunos casos de congresistas que con información privilegiada, han sacado provecho de los desfalques bancários, invirtiendo su dinero con éxito con la ayuda de información privilegiada dada a ellos por gente en Wall Street. Tampoco han informado el hecho de que John Corzine, ni siquiera ha sido llamado a declarar por el escándalo financiero de MF Global.

“Ellos son ladrones que quieren que los militares protejan sus crímenes”, afirmó Alex Jones. Hace mucho tiempo, los estadounidenses eran las personas mejor informadas en el mundo desarrollado, pero en las últimas décadas se han convertido en los menos informado de todos. Esto es debido al hecho de que los medios han asumido la responsabilidad de alimentar únicamente información que los mantenga ignorantes del hecho que su país y su gobierno están cada vez más dominados por las corporaciones y los bancos.

El problema con leyes como S.1867 es que se hace usa términos peligrosamente indefinidos y amplios, dando poderes igualmente amplios y abiertos a aquellos que buscan tenerlos. Por ejemplo, una década después de 9/11, ninguna autoridad ha definido con precisión el concepto de pertenencia o afiliación a cualquier organización terrorista. En estos momentos, la policía utiliza simples acusaciones como la base para ejecutar el tipo de esquemas que se imponen a través de legislación como S.1867. Esto es así, porque la mayoría de las acusaciones hechas por las agencias policiales son casi imposibles de probar. La consecuencia de esto es que la nueva legislación se hace a mano de lenguaje vago en cuanto sea posible para que más y más personas (sospechosos) puedan ser incluidas bajo el paraguas de tal legislación.

En este momento, sólo las personas detenidas en el campo de batalla pueden ser enviadas a prisión en lugares secretos y por tiempos indefinidos. Es por eso que S.1867 efectivamente etiqueta el territorio estadounidense como parte del campo de batalla, de modo que cualquiera que viva o en cualquier momento se movilice en el territorio de los EE.UU. pueda ser legalmente secuestrado para siempre sin ninguna repercusión legal. La disposición que busca detener indefinidamente a cualquier sospechoso de hecho implica un perpetuo estado de guerra, porque como ha sucedido con legislación anterior, este no explica o establece ningún límite o meta clara para los conflictos en los que Estados Unidos está involucrado. La disposición dice que no hay nada en ella contenida que implica ninguna restricción en el uso de la fuerza militar. La legislación no prevé la revisión del Congreso o de cualquier definición de lo que es “victoria” o cuándo las disposiciones adoptadas en virtud de la ley S.1867 serían anuladas.

“El uso de la fuerza militar debe comenzar en el Congreso. El Congreso tiene el poder de declarar guerra, y no debemos dar ese poder al Presidente. No debemos permitir que el Presidente participe de manera unilateral en decisiones de guerra. El Congreso debe recuperar sus funciones constitucionales “, concluyó el Senador Paul.